Dos días de la vida de Didí y Gogó constituyen Esperando a Godot. El primer día, los dos compañeros aguardan en un camino, junto a un árbol, a un tal Godot con quien están citados.
Dos días de la vida de Didí y Gogó constituyen Esperando a Godot. El primer día, los dos compañeros aguardan en un camino, junto a un árbol, a un tal Godot con quien están citados. No es Godot quien llega sino Pozzo y Lucky, el amo y su esclavo, el uno tirando con una cuerda del otro. El encuentro termina con un escandaloso número verbal de Lucky, a quien se invita a "pensar". Un muchacho, enviado de Godot, viene a anunciar a Didí y Gogó que aquél "no vendrá esta noche, pero sí mañana con seguridad". Bruscamente oscurece y sale la luna. Esta primera jornada de espera ha terminado. La segunda jornada se desarrolla de manera casi semejante y los temas son recogidos y explotados en un ángulo diferente: los zapatos, los recuerdos, el árbol, la cita improbable, etc. Pozzo y Lucky, laminados por un mortal deslizarse del tiempo (el amo se ha quedado ciego y el esclavo mudo) dan una vueltecita y se van. Podría alzarse para varias jornadas más, hasta el infinito; volverían los mismos temas, gastados por el uso.
Esta producción tiene la particularidad de que la interpretación corre a cargo de actrices, experiencia que nunca se ha llevado a cabo, así como la utilización de una nueva traducción del texto que tiene en cuenta el texto revisado por el propio Beckett desde la perspectiva de la dirección, veinte años después de haberla escrito. Se puede considerar, por tanto, una nueva versión da la obra más representada del autor, que se estrena por primera vez en España.
"...ESPERANDO A GODOT es a la vez un clásico y una trampa mortal. No cabe interpretación mediocre, la que no es inteligente es plomiza. No es el caso. El montaje de Cortizo, austero como la pieza exige, es convincente, muy bien llevado de tiempos y bien interpretado. Probablemente pasará tiempo antes de que tengamos otra oportunidad parecida al alcance de la mano, así que quien tenga a Godot pendiente o no lo haya visto últimamente, hará bien en ir a esperarlo a La Puerta Estrecha..."
GUÍA DEL OCIO – Madrid
"...Sólo con la voluntad de aquellos que sin miedo y con paso firme decidan cruzar el umbral del teatro, encontrarán en LA PUERTA ESTRECHA un tesoro. No sirven palabras mágicas, no hay ternura ni fábula... La puesta en escena de ESPERANDO A GODOT a cargo de "La Pajarita de Papel" consigue transmitir la ironía de la obra, la espera. Rodolfo Cortizo, sin adornos ni florituras verbales ni escenográficas demuestra tener las ideas muy claras... Hay teatro, no espectáculo (tomen nota los que se sientan aludidos), y sin presupuestos descomunales (sigan tomando nota), las palabras y los gestos de las actrices entrarán en la cabeza de quien se atreva a mirarlas..."
LA CENTRAL – Barcelona
"...El equipo de actrices funcionaba como un reloj, perfectamente sintonizadas, en una propuesta nada fácil, ya que lo que se tenía que materializar era uno de los textos más extrañamente bellos y duros de Beckett. Al salir de la sala uno se preguntaba si era real lo que había visto tras las cortinas..."
PRIMER ACTO – Madrid
"...Una creación tan libre de la realidad, tan aparentemente distanciada y tan absurda, requiere sobre todo una especial metafísica del espacio escénico, en cuya sugestión han de ser envueltas, a modo de maligna niebla, las actrices. Y esto está magníficamente logrado por la puesta en escena, lo cual deja sentir, sin verse, la mano de Rodolfo Cortizo, el director. Por mi experiencia sé que con el tiempo este tipo de funciones, se convierten en tesoros impagables de la memoria biográfica personal..."
ÁVILA DIGITAL - Ávila