¿Quién es Oswaldo Digón?

Ramón "el Enchufao"

¿Un cómico triste? ¿Un gallego trascendental? ­-¿Los hay de otra clase?- ¿Un ex funcionario médium que adivinó en algún punto de la autopista que lleva a Torre Pacheco que se ganaría mejor la vida en la farándula que compulsando documentos en las oficinas de un ayuntamiento?

¿Quién es Oswaldo Digón y de dónde ha sacado ese nombre tan molón? (Disculpen la rima.)

Con la intención de responderme a mí mismo a todas esas preguntas, acudí una vez más –ya sabéis, me gusta estar en la lista- a las oficinas barcelonesas de esta (vuestra) central del ocio, a uno de esos entrañables y cada vez más míticos Atrápalo en Directo.

Este formato es sin duda algo especial. Es decir, los artistas se esfuerzan cada vez más por romper la cuarta pared e involucrar al público en sus espectáculos.

Sin ir más lejos, en su propio show, “Diálogos en 3D”, Oswaldo improvisa monólogos y gags en función de los tweets con el hashtag #mehacebola en Twitter (volveremos sobre el concepto más adelante, que tiene miga). Pero solamente en encuentros en petit comité como los Atrápalo en Directo puede uno llegar a conocer a la persona detrás del personaje. Y créanme que vale la pena.

Y ahí fue precisamente donde una inocente, aunque muy pertinente, pregunta, y la correspondiente y muy ambigua respuesta de Digón acabó por desconcentarme. Digón llegó acompañado de otro cómico, éste sí sé quién es, Txabi Franquesa (pelazo), y se dieron primero un paseo por las oficinas, como si su guía quisiera dejar claro a sus ilustres y cómicos invitados la seriedad de la empresa.

Pero volvamos a la pregunta: en el video no se oye, pero un mozo de marcado acento catalán le pide a Oswaldo que defina el tipo de humor que practica. Aquello desembocó en un (permitidme que use una etiqueta) surrealista (bueno, otra más) y algo absurda discusión sobre las etiquetas del humor. Y allí mismo fue donde Oswaldo y Txabi iniciaron su deriva regada de humor, humor freudiano que ha sustituido la fijación oral por una fijación con el bolo alimenticio. Humor, en definitiva sin etiqueta, que salta del erotismo de las pestañas de la Nancy, a un grupo de pop olvidado de los ochenta, la importancia de los mcguffin en el relato de la modernidad, el sadismo que esconden los nombres de  los medicamentos, y la catalanidad. Todas ellas, cosas que #hacenbola.

Ante las muy gallegas evasivas de Oswaldo, auxiliado en el intento de fuga por Txabi, una pelirroja en primera fila les pide -casi diría que les requiere, les apremia, les exige- que se mojen. Y vaya si se mojaron.

A todo esto, aquí Ramón, servidor de usted, se fue sin saber muy bien quién es o qué hace Oswaldo Digón, y con muchas ganas de entrar en su tercera dimensión.