Cuando la nieve se derrite… Andorra sigue viva

Marta Lizcano
Aunque las pistas de esquí cierren, Andorra está abierta 365 días al año. El país vecino tiene un montón de atractivos más allá de la temporada invernal y aquí te descubro planes de lo más interesantes para que escapes este verano de la rutina.

Se acerca el calor. Empieza la guerra por el aire acondicionado en tu oficina; en casa, te mueves al ritmo del ventilador; y, en la playa, no encuentras sitio donde colocar la toalla. Algunas ciudades españolas empiezan a mimetizarse con Mordor y es el momento de pensar dónde escaparse de los tópicos. Mis destinos favoritos para esta época del año son los de naturaleza, para respirar un poco de aire fresco, desconectar (¡mejor si no hay cobertura!) y poder volver con las pilas cargadas a nuestra ciudad infernal. Con un 90 % de zona verde, Andorra es un destino perfecto.

Vale, te has apuntado a la moda del detox digital, pero tampoco quieres ser el dominguero que sale en las noticias porque se ha perdido en el monte. Libera tu móvil de espacio, que seguro que lo tienes a petar de memes del Whatsapp, y comienza tu viaje a Andorra descargándote la app de Turismo activo: en ella podrás planificar rutas, consultar mapas sin conexión y recopilar información sobre todo lo que has caminado, porque no nos engañemos: cuando vuelvas a casa vas a compartir tus rutas en todas las redes sociales y alguna más. Y eso lo sé yo, tú y tus seguidores.

Lo cierto es que Andorra tiene paisajes en los que apetece perderse y ponerse a pegar saltos como Heidi rodeada de cabritas, como por ejemplo los que envuelven Encamp. Cogiendo el funicular llegarás a Solanelles, donde podrás ver el lago, hacer excursiones en 4×4 o practicar senderismo mientras te quedas embobado viendo el entorno. En este mismo lugar se celebrará en septiembre una Spartan Race. Todavía tienes tiempo de entrenar.

Tranqui, que también hay planes para los Indurain como tú. Además de formar parte del recorrido oficial de La Vuelta 2017, Andorra tiene carreteras orientadas al cicloturismo y hoteles pensados para el descanso de los deportistas. ¿Te estás imaginando ya pedaleando a lomos de tu bici? Da igual dónde estés en este momento, empieza a planear ya mismo las rutas y visitas culturales que harás a lo largo del viaje. Si fuera tú, no me iría sin visitar el pico Casamanya, desde donde podrás ver una panorámica de 360º de Andorra. Ya te oigo inflar las ruedas… ¡Ah! Y no te olvides de que en julio se celebran los Andorra Outdoor Games, con pruebas de triatlón, running y ciclismo.

Si eres como yo y estás sudando solo con leer sobre deporte, pero en cambio no te pierdes una sola actuación del Cirque du Soleil, estás de enhorabuena: durante todo el mes de julio podrás ver SCALADA STELAR, su nuevo espectáculo. Y lo mejor de todo es que hay entradas gratuitas, ¡corre, que se acaban!

En caso de que quieras viajar en familia y te atrevas con cosas nuevas, te recomiendo visitar Naturlandia y tirarte por el Tobotronc, un tobogán de ¡5 kilómetros de largo! El parque ofrece muchas más actividades, como tiro con arco, camas elásticas o un aula de naturaleza donde los niños (y no tan niños) aprenderán sobre la fauna y la flora de la zona. Si te has quedado con ganas de seguir deslizándote, también puedes probar la tirolina más larga de Andorra, que encontrarás en Mon(t) Magic, en el Family Park de Canillo. Ambos sabemos que te apetece a ti más aún que a tus hijos, pero será nuestro pequeño secreto.

Para reponer fuerzas, acércate a Caldea con tu pareja y regalaos mutuamente un circuito termal con hidromasaje, sauna, camas de agua… Mientras tanto, los peques podrán disfrutar de Likids, un espacio del balneario pensado especialmente para ellos. Saldréis de allí flotando.

¿Ni la naturaleza, ni los balnearios son lo tuyo? Tanto si vas con amigos como si los haces por el camino, prueba la gastronomía. La gastronomía siempre es un plan perfecto. Es EL plan por excelencia. Comer es un placer y Andorra lo sabe, por eso no os podéis ir del Principado sin tomar una cerveza Alpha, producida en el país, maridada con unos canelones a la andorrana o con unos caracoles a la llauna con alioli de membrillo. Y, en caso de que seáis más de líquidos que de sólidos, acercaos a alguna bodega donde podréis regalaros los sentidos visitando los viñedos o realizando una cata con auténticos vinos de altura.

Fotos: Turismo de Andorra

A veces es difícil encontrar alguien con quien viajar: cuadrar fechas, gustos, presupuestos… pero esa no es razón para quedarse en casa. Elige alguno de los circuitos de descenso en BTT, descarga adrenalina y retírate más tarde a descansar en un refugio de montaña.

Si te van más los viajes culturales, no te pierdas la ruta del románico andorrano, con iglesias como la de Santa Coloma, con su original campanario de planta circular, o el puente medieval de La Margineda. También puedes visitar el museo Thyssen de Andorra, donde  se expone durante estos meses la colección “Escenaris. De Monet a Estes. De Trouville a Nova York”. Y si eres fan de Dalí, no te pierdas la escultura “La Noblesse du temps”, situada en Andorra la Vella. No pierdas la ocasión de sacar fotos e instagramearlas.

Si te está gustando lo que te cuento, pero eres más de dejarte llevar, pilla el bus turístico y olvídate de seleccionar actividades; hay siete rutas, así que seguro que encuentras la tuya. Yo me quedo con la siete, en la que puedes disfrutar de unos paisajes preciosos. Y tú, ¿con cuál te quedas? ¿Necesitas más información?