Aquellos pequeños placeres

Arnau Serra

“Ay, ¿sabes qué es lo que me vuelve loca?”, le susurra, un poco tímida. “Llegar a casa, quitarme los zapatos y meter los pies en la bañera con agua súper caliente. Me puedo estar horas”. A gustos, colores. Su amiga se la queda mirando con aquella expresión de indiferencia disimulada y le suelta: “Qué sencilla eres, Gracielda. Yo necesito salir a escudriñar todos los escaparates buscando aquellos zapatos hechos para mí”.

Quieres tu paseo diario; escuchar la radio desde la cama puede ser tu devoción; hacerte la manicura con tus amigas te provoca un placer divino; te tumbas a dibujar mentalmente las nubes; o ya tienes suficiente con esa “Crazy little thing called love”, que cantaba Queen. Todos tenemos nuestro pequeño placer cotidiano. Como tomar una Pirámide Lipton.

Lipton y sus Pirámides están interesados en estos momentos cotidianos y por eso nos preguntan qué nos gusta. Yo se lo diría. Mira, por revelar este pequeño secreto igual te toca un Pack Aventura, una Tarjeta iTunes, un Cheque Belleza o lo que sea.

Por cierto, eso de Pirámides es porque estas bolsitas tienen esa forma. Y la tienen porque así hay más espacio para hojas de té más grandes, acompañadas de flores y trozos de fruta. ¿Te imaginas cuántas combinaciones posibles para una taza de té en tu momento del día?

Pues casi tantas combinaciones como hallazgos de Atrápalo, nuestros hibiscus diarios. Y hablando de hibiscus y pirámides, mirad qué foto sacó nuestra compañera Ana Paula en El Cairo: