Los 5 barrios del mundo donde presumir de moderno
Estás planeando un viajazo: te has comprado la guía más completa, has hecho las rutas por días, lo tienes todo controlado y de pronto llega ese compañero tuyo de curro (que se mueve más que el neceser del fugitivo) con el siguiente comentario: “¿Vas a Roma? Pues tienes que pasarte por el barrio de Pigneto, es lo más cool, lo más inn, lo más chic, lo más trendy y lo más hever clever”.
Tú, obviamente, no has entendido nada de nada, pero asientes con la cabeza y cuando le pierdes de vista, buscas en Internet ese barrio. Vaya, parece que mola. ¡Maldita sea! ¿Y ahora cómo encajas esto en tus planes? ¿Y de dónde sale eso de Pigneto? De toda la vida, si vas a Roma, ves los foros, el Coliseo, San Pedro pero… ¿Pigneto?
Pues para que la próxima vez, no te pase esto y puedas darle en la cara (a base de conocimiento, ¡ojo!) a ese compi tuyo, allá van los barrios más modernetes del mundo:
Shimokita… qué? ¡Shimokitazawa!
Tokio es una ciudad inmensa que se mueve al mismo ritmo que sus trenes bala. Pero hay un pequeño barrio que, como si fuera una pequeña aldea de irreductibles galos, lleva otro tempo más pausado. Por momentos, parece que estás dando un tranquilo paseo por un pueblecito europeo, sino fuese por los kanjis. Tiendas de ropa de segunda mano y vintage donde comprarte esa ‘bomber estrambótica que odias y amas a partes iguales’ por tres euros. Un sitio muy bonito de estilo neoyorkino donde hacer brunch. Pequeños teatros. Callejuelas llenas de grafiti. Locales con música en directo. En definitiva: un oasis de vida bohemia alejado de las luces de neón.
Something really cool, it’s Williamsburg
En Nueva York hay muchos mini-mundos que mola conocer. Pero este barrio de Brooklyn es el que tiene más rollito moderno. Naves y construcciones de techos bajos. Estilo industrial. Mercadillos de comida. Ambiente de artistas. Si fueras un escritor en busca de inspiración, no vivirías en la Quinta Avenida (en parte porque no podrías pagarlo), sino que vivirías aquí. Mola todo. Te dan ganas de ‘instagrammearlo’ todo. De grabarte un videoclip y sacar todo el flow que tienes en el cuerpo. No hay un monumento representativo en esta zona, simplemente recorre sus calles y disfruta del aroma de lo auténtico.
Se vuoi Graffiti, andatene a Pigneto
En Roma está todo “al lado”. La almendra central tiene todos los puntos de interés del típico turista. Pero ese no eres tú. Si quieres ver la verdadera Roma vas a tener que ir a las afueras, coger un transporte público y llegar a Pigneto. Antiguo barrio obrero que hoy parece un museo de street art al aire libre. Mucha de su fama se debe a sus grafitis y a la malograda figura del controvertido director italiano Pier Paolo Passolini (que rodó en este barrio Accatone). No es un barrio bonito, ni el destino ideal para una luna de miel. Es el sitio perfecto para sacar tu cámara reflex y retratar el costumbrismo romano.
Foodie + Techno = Kreuzberg
A través de un precioso puente de nombre impronunciable (Oberbaumbrücke) se accede al emblemático barrio de Kreuzberg. Un sitio que de primeras no parece Berlín, pero es Berlín y además, está cerca del muro. La mayoría de su población es inmigrante, lo que se traduce en… ¡gran oferta gastronómica a la vista! Restaurantes tailandeses, africanos y vietnamitas mezclados con locales modernos. El lugar perfecto donde sacar a relucir tu lado más foodie y luego mover el esqueleto en una discoteca techno. En Kreuzberg hay mucha vida nocturna, así que ten cuidadín que se te va de las manos y en Berlín hay mucho que ver como para pasarte la mañana en la cama con dolor de cabeza.
Miguel Bombarda, donde se parte el bacalao
Vale, ya te has comido una francesinha y has visitado una bodega. Pero Oporto cuenta con un movimiento vanguardista que le sale por los poros y si te despistas, se te puede escapar. Es de obligado cumplimiento recorrer la calle Miguel Bombarda y perderse entre sus alrededores. Galerías de arte. Tiendecitas adorables. Restaurantes cool. Cajas de luz decoradas con grafitis de personajes famosos. Una frutería hiper costumbrista con su azulejo clásico y justo al lado, una tienda de lámparas de diseño que convierte en arte el hecho de poner una bombilla. Vas a querer comprarlo todo, todo y todo.
Estos son solo unos pocos, pero hay muchos más. Este tipo de barrios modernos no suelen aparecer en las guías, sino más bien en el mail de tu amiga friki que recorre el planeta por cuatro duros. Como si te pasara ‘tips’ de estraperlo. Pero pronto aparecerán en un programa de televisión (tipo: segovianos por el mundo) y se petarán de turistas. Por eso ahora, justo ahora, es el momento de que descubras estos curiosos lugares de moderneo all over the world.
