10 fotos que lo petarán en Instagram si vas a Nueva York

Rodrigo Merluzo
Cuando viajas a Nueva York, tienes la sensación de que estás dentro de una película. En cualquier momento alguien va a gritar: ¡Corten! Y descubrirás que todo es un gran decorado.

Antes de que eso ocurra, tienes dos opciones: rodar un corto amateur pseudo intelectual en blanco y negro que te abra las puertas de los principales festivales de cine independiente; o sacar el móvil e instagramear sin piedad. Así que busca tu filtro favorito y abandónate al cálido abrazo de la vanidad.

El apartamento de ‘Friends’

En el barrio de Greenwich Village, en la esquina de Grove con Bedford te encontrarás con mucha gente mirando hacia arriba y haciendo fotos aparentemente a la nada. Reconocerás la fachada al instante como la casa de tus amigos Joey, Phoebe, Chandler, Mónica, Ross y Rachel. Después, mirarás alrededor buscando el Central Perk pero… no está. Lo siento, la cafetería nunca existió. Ya tienes edad para afrontar la verdad: en la tele todo es mentira.

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El beso en el ‘Grand Central’

Para esta foto tienes que tener un compinche que se ponga en la parte alta de la estación. Después ve a la parte baja. Allí hay un ajetreo que parece un avispero en ebullición. Agarra a tu pareja por la cintura y dale un buen morreo de esos que hacen que se te ponga la libido por los aires. Todo a tu alrededor se mueve frenético, pero tú detienes las agujas del reloj con ese beso y con un filtro en blanco y negro muy contrastado como el Inkwell. Enhorabuena, acabas de esculpir en el tiempo.

Cazafantasmas

Frikismo bonito. En el sofisticado barrio de Tribeca, hay un parque de bomberos en el que ocurren cosas muy raras. ¿A quién vas a llamar? ¡Cazafantasmas! Sí. Muy fuerte. Ahí estuvo Bill Murray, Dan Aykroid y compañía con sus monos y sus mochilas disparando sus rayos contra Moquete, el simpático fantasma verde. Así que no pierdas oportunidad de inmortalizar este momento. Pero recuerda que no debes cruzar los rayos.

Tocarle los huevos al Toro de la Bolsa

Vale, esto puede ser pasarse un poco de la raya. Puede ser hasta grosero. Pero también muy divertido y quizá sea eso lo que necesita tu cuenta de Instagram: ¡un poco de irreverencia! Además, al pobre animal de bronce no le va a importar y de alguna forma (un poco metafórica) estarías tocándole las partes nobles a los poderes económicos de los EEUU y eso siempre da gustito. Justicia poética.

Dale caña al street art

Nueva York está lleno de Museos donde dar rienda suelta a tus instintos más sedientos de cultura: Metropolitan, Moma, Guggenheim, etc… Pero seamos claros, si subes una foto con La Noche Estrellada de Van Gogh, ¿cuántos likes vas a tener? Pocos. Muy pocos. Por suerte para ti, también existe una gran cultura graffitera. Desde el Highline (antiguo recorrido de tren reconvertido en paseo) en el barrio de Chelsea tienes multitud de graffitis. El más fotografiado del paseo es la particular interpretación multicolor de la foto del beso de Times Square de Victor Jorgensen. También puedes darte una vuelta por Little Italy, un barrio repleto de arte urbano que hará que tus followers se mueran de envidia. Si además contrastas la imagen a tope, lo petas.

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El portal de Carrie Bradshaw

En algún momento te vas a ir de compras. Y lo sabes. Cuando vayas cargado con mil bolsas (aunque estés deseando llegar a tu habitación) haz otro pequeño esfuerzo y dirígete al West Village. Busca la calle Perry Street 66 y ¡zas! Por arte de magia te acabas de convertir en Sarah Jessica Parker en Sexo en Nueva York llegando a su casa después de un duro día de shopping. ¿Se puede molar más? De nada.

En el escaparate de Tiffany

Las primeras luces del día llenan de luz la Quinta Avenida. Es muy pronto, pero aún así hay mucho movimiento. Y es que lo de que Nueva York es la ciudad que nunca duerme es verdad. Pasa por una cafetería, pide un café para llevar y un croissant. Y te lo llevas todo de paseo al cruce de la quinta con la calle 57. Ahí verás el mítico escaparate de la joyería más famosa del mundo: Tyffany & Co. Y zámpate ahí tu desayuno con diamantes. Y cuéntaselo al mundo, of course.

Los puentes de Brooklyn y Manhattan

Después de los Puentes de Madison, no hay puentes más famosos en todo el planeta. Por la tarde, sal de Manhattan y adéntrate en Brooklyn. En la parte conocida como DUMBO, más concretamente en Water Street tendrás una vista impresionante del Manhattan Bridge. Vuelve a recurrir a ese filtro contrastado en blanco y negro y tendrás un fotón. Pero fotón, fotón.

Cuando vaya anocheciendo, recorre el puente de Brooklyn hacia Manhattan. Aparecerán las primeras luces de los edificios de la Gran Manzana. Las vistas desde puente son el recopete. Aquí lo complicado es elegir una sola foto que subir, así que sube una secuencia de cómo va anocheciendo.

NOTA: los atardeceres, anocheceres, amaneceres y otros ‘ceres’ son siempre muy bien valorados.

Madison Square Garden

Te guste o no el baloncesto tienes que ir a un partido de los Knicks, y disfrutar del show de la NBA. Obviamente, tendrás que gastarte los dineros en una mano de goma gigante y gritar a pleno pulmón: DE – FENSE! Sino, es como si no hubieras viajado a Nueva York.

Y si quieres ir de alternativo y los Knicks son demasiado mainstream para ti, ve al estadio de los Nets en Brooklyn y haz la misma operación. Título de la foto: I LOVE THIS GAME.

Rueda un minivideoclip in Williamsburg

Instagram permite subir vídeos de hasta un minuto. Así que ponte tus galas de molar, y ve al barrio de Williamsburg. Naves Industriales, mercadillos vintage, ferias de comida, foodtrucks y tú moviendo el esqueleto al son de tu canción favorita. Haz hueco en la estantería de tu casa que el Grammy está al caer. Hashtags: #dancing #williamsburg #molomucho #sigosiendoelrey

Créditos: Rodrigo Merluzo & CC0 License

Y hasta aquí llega nuestro particular tour. Instagram mola. Nueva York mola mil. Y subir fotos guays a Instagram en Nueva York te hará subir como un cohete al Olimpo de los Dioses del Postureo. Pruébalo. Y luego nos lo cuentas.

Have fun, my friend!